Cita bíblica:
Filipenses 4:13: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.»
Reflexión:
El pesimismo es como una sombra que oscurece nuestra visión espiritual, impidiéndonos ver las bendiciones y oportunidades que Dios coloca en nuestro camino. En primer lugar, debemos reconocer que esta actitud no proviene de Dios, sino de nuestra propia incredulidad. Por lo tanto, es fundamental entender que el pesimismo es una batalla espiritual que podemos vencer mediante la fe y la confianza en las promesas divinas.
Pedro, el discípulo de Jesús, nos muestra claramente cómo el pesimismo puede afectar nuestra fe. Cuando caminó sobre las aguas hacia Jesús (Mateo 14:22-33), inicialmente lo hizo con confianza. Sin embargo, al ver el viento y las olas, el pesimismo se apoderó de él y comenzó a hundirse. Esta historia nos enseña que cuando quitamos nuestros ojos de Cristo y nos enfocamos en las circunstancias, el pesimismo nos hace hundir.
Para vencer el pesimismo, necesitamos renovar nuestra mente diariamente con la Palabra de Dios. Debemos declarar Sus promesas en voz alta, meditar en testimonios de Su fidelidad y rodearnos de hermanos en la fe que nos animen. El ayuno y la oración son herramientas poderosas para combatir esta actitud negativa. Recordemos que somos más que vencedores en Cristo Jesús.
El pesimismo no tiene lugar en la vida de un hijo de Dios. Cuando elegimos confiar en Sus promesas y mantener nuestra mirada en Él, experimentamos una transformación sobrenatural que nos permite ver las circunstancias desde Su perspectiva. La victoria sobre el pesimismo es posible cuando decidimos caminar por fe y no por vista.
Oración
«Padre Celestial, te pido que renueves mi mente y fortalezca mi fe. Ayúdame a mantener mis ojos fijos en Ti y no en las circunstancias. Que tu Espíritu Santo me llene de esperanza y optimismo fundamentado en tus promesas. En el nombre de Jesús, amén.»
Video Relacionado:
Te recomiendo escuchar la canción Creo en ti—Julio Melgar Ft. Marcela Gándara | Letra
