Devocional 6 de octubre de 2025: «Recuerda Tu Origen: La Gratitud que Transforma.»

Escucha o descarga el devocional y comparte!

Cita bíblica:

Acuérdate que en el desierto Jehová tu Dios te ha traído durante estos cuarenta años, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos. – Deuteronomio 8:2

Reflexión:

En nuestro caminar cristiano, a menudo olvidamos de dónde provino nuestra salvación. Sin embargo, la gratitud por nuestro pasado es fundamental para mantener la humildad. En primer lugar, debemos reconocer que nuestra posición actual no es fruto de nuestros méritos, sino de la misericordia divina. Por tanto, recordar nuestro origen no es un ejercicio de nostalgia, sino una práctica espiritual que nos mantiene anclados en la verdad. Cuando olvidamos las profundidades de las que fuimos rescatados, comenzamos a construir pedestales para nosotros mismos, robando la gloria que pertenece únicamente a Dios.

whatsapp_channel

El rey David entendió esta verdad profundamente. En un momento crítico de su vida, sintió que su memoria lo traicionaba, que no podía recordar claramente las maravillas que Dios había realizado en su vida. En el Salmo 77:11-12, David exclamó: «Me acordaré de las obras de JAH; sí, haré yo memoria de tus maravillas antiguas. Meditaré en todas tus obras, y hablaré de tus hechos.» David, aquel pastor que fue ungido rey, nunca quiso olvidar cómo Dios lo sacó del campo, lo protegió de Goliat, y lo rescató repetidamente de Saúl. Sabía que recordar era un acto deliberado, una decisión consciente que debía tomar para mantener su corazón en la perspectiva correcta frente a las bendiciones y privilegios que había recibido.

¿Cuántos de nosotros hemos olvidado nuestros inicios humildes? SE NOS OLVIDA DE DONDE DIOS EN SU INFINITA MISERICORDIA NOS HA SACADO. Aquellos días de escasez, las noches de angustia, los momentos de soledad… y ahora, bendecidos, nos hemos vuelto arrogantes. Nuestro orgullo se ha elevado a tal punto que juzgamos a otros que están donde una vez estuvimos nosotros. Si te encuentras en esta situación, es tiempo de recordar, de mirar antiguas fotografías, de visitar lugares que te conecten con tu historia. Vuelve al pasado, no para quedarte allí, sino para agradecer la transformación y mantener la humildad que honra a quien te rescató.

La memoria santa es un antídoto contra la ingratitud y el orgullo. Cuando recordamos nuestros orígenes, experimentamos una renovada gratitud que nos impulsa a servir a otros con compasión. Definitivamente, esta disciplina espiritual de recordar no solo fortalece nuestra relación con Dios, sino que también nos mantiene sensibles a las necesidades de quienes todavía están atravesando lo que nosotros ya superamos. El Señor nos ha elevado no para que nos distanciemos de los demás, sino para que extendamos la mano y mostremos el mismo amor con el que fuimos levantados. Recuerda siempre: la altura de tu éxito debe medirse por la profundidad de tu gratitud.

Oremos juntos:

Padre celestial, perdóname por las veces que he olvidado de dónde me has sacado. Reconozco que todo lo que tengo y todo lo que soy es resultado de tu gracia inmerecida. Hoy decido recordar mi pasado, no para gloriarme en mis logros, sino para exaltar tu misericordia. Ayúdame a mantener un corazón humilde y agradecido, que nunca olvide las profundidades de las que me rescataste. Que mi vida sea un testimonio constante de tu poder transformador y que nunca deje de extender a otros la misma gracia que recibí de ti. En el nombre de Jesús, amén.

Video relacionado:

Recomiendo la canción Jesús Adrián Romero – Se Acaba Todo  que nos recuerda la importancia de mantener viva la memoria de lo que Dios ha hecho en nuestras vidas.

Publicidad

Deja un comentario

Este sitio usa cookies para una mejor experiencia del usuario.    Más información
Privacidad
Secured By miniOrange