Cita bíblica:
Santiago 2:17 (NVI) – «Así también la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta».
Reflexión
La fe es un componente fundamental de nuestra relación con Dios. Creer en Él y confiar en Su Palabra es el fundamento de nuestra salvación. Sin embargo, la Biblia nos enseña en Santiago 2:17 que la fe sin obras es fe muerta. Esto nos hace pensar en la importancia de mostrar nuestra fe en nuestras acciones y conductas diarias.
La verdadera fe se muestra en nuestras obras. No se trata de ganar la salvación por nuestras obras, porque la salvación es un regalo de la gracia de Dios. Pero una fe viva se refleja en la forma en que vivimos y en la forma en que tratamos a los demás. Nuestro trabajo es prueba de que nuestra fe es real y que hemos sido transformados por el amor de Dios.
Imagina un ejemplo cotidiano: una persona dice tener fe en Dios, pero en su vida diaria no muestra compasión ni amor por los demás. Esta persona puede decir las palabras correctas sobre su fe, pero sin acciones concretas para respaldar esas palabras, su fe se vuelve sin vida. Por otro lado, una persona que verdaderamente vive su fe se esforzará por amar a su prójimo, servir a los necesitados y compartir el mensaje de salvación. Sus obras muestran que su fe es real y genuina.
Es importante recordar que nuestras obras no nos salvan, sino que son el resultado de vivir la fe en acción. Cuando nos rendimos a Cristo y nos convertimos en Sus discípulos, Su Espíritu Santo mora en nosotros y nos ayuda a hacer buenas obras para honrar a Dios y bendecir a los demás. Nuestro trabajo es una respuesta de gratitud y amor a Dios por todo lo que ha hecho por nosotros.
En nuestras oraciones, podemos pedirle a Dios que fortalezca nuestra fe y nos guíe por el camino de las buenas obras.
Oración:
Padre celestial, te agradecemos por tu don de fe y amor incondicional. Reconocemos que nuestra fe debe ir más allá de las palabras y manifestarse en hechos concretos. Ayúdanos a vivir una fe viva que se refleje en nuestras acciones diarias. Danos compasión por los necesitados, amor por nuestro prójimo y valor para compartir el mensaje de salvación. Que nuestras obras sean una luz hacia ti y atraigan a otros a conocerte. En el nombre de Jesús, Amén.