Cita bíblica:
Salmos 119:105 «Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino» –
Reflexión:
En nuestro caminar cristiano, frecuentemente atravesamos temporadas donde el cielo parece de bronce y la voz de Dios se siente distante. Sin embargo, es precisamente en estos momentos cuando debemos recordar que Dios nos ha dejado su Palabra como guía infalible. Así como un faro guía a los navegantes en la oscuridad, las Escrituras iluminan nuestro sendero cuando nos sentimos perdidos o desorientados espiritualmente.
Consideremos al rey Josías, quien encontró el libro de la Ley en el templo cuando Israel había olvidado la Palabra de Dios. En 2 Reyes 22, vemos cómo este joven rey, al leer las Escrituras, experimentó una transformación profunda que lo llevó a restaurar la adoración verdadera en toda la nación. Aunque Josías vivía en una época donde la voz profética era escasa, fue a través de la Palabra escrita que Dios lo guió para liderar una de las reformas espirituales más significativas en la historia de Israel.
Cuando sientes que no puedes oír la voz de Dios, Su Palabra escrita se convierte en tu brújula espiritual. Al sumergirte en las Escrituras, el Espíritu Santo comienza a iluminar verdades que antes pasaban desapercibidas. Es como cuando tus ojos se adaptan a la oscuridad y empiezas a ver con claridad. La Biblia no es solo un libro; es el medio por el cual Dios revela Su corazón y voluntad para tu vida.
La Palabra de Dios es viva y eficaz, capaz de transformar nuestro entendimiento y sensibilizar nuestro espíritu. No debemos desanimarnos cuando atravesamos períodos de sequía espiritual, pues tenemos el tesoro invaluable de las Escrituras. Al dedicar tiempo a la lectura y meditación de la Palabra, encontraremos que Dios siempre tiene algo que decirnos, y Su voz se hace más clara con cada página que leemos.
Oración:
Padre Celestial, gracias por el regalo de Tu Palabra. Ayúdame a desarrollar disciplina en la lectura de las Escrituras y sensibilidad para escuchar Tu voz a través de ellas. Que Tu Espíritu Santo ilumine mi entendimiento y transforme mi vida mediante Tu Palabra. En el nombre de Jesús, amén.