Escucha o descarga el devocional y comparte!
Cita bíblica:
«Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.» – Mateo 7:13-14
Reflexión:
En nuestra sociedad moderna, frecuentemente buscamos atajos y soluciones rápidas. Sin embargo, la Palabra de Dios nos enseña una verdad poderosa: es preferible tomar el sendero difícil pero justo, que elegir caminos aparentemente fáciles que nos alejan de Su voluntad. Aunque el camino correcto requiera más tiempo y esfuerzo, siempre produce frutos eternos y bendiciones genuinas que perduran.
Acán, soldado israelita, decidió tomar un atajo deshonesto durante la conquista de Jericó. Robó tesoros consagrados a Dios y los escondió bajo su tienda, creyendo que nadie lo descubriría. Su pecado trajo derrota a todo Israel en Hai. Similarmente, el rey David intentó ocultar su adulterio con Betsabé ordenando la muerte de Urías. Ambos eligieron caminos aparentemente «fáciles» que resultaron en consecuencias devastadoras para ellos y sus pueblos, demostrando que los atajos pecaminosos siempre cobran un precio alto.
Es mejor el camino largo haciendo lo correcto que los atajos incorrectos. Cuando elegimos la puerta estrecha que Jesús mencionó, ese sendero que demanda esfuerzo y paciencia, experimentamos la paz de Dios. Aunque podríamos resolver problemas con sobornos o acelerar placeres con dinero, nada supera preguntarle diariamente: «¿Señor, hay algo en mí que te ofende?» Esta simple oración transformaría nuestras vidas completamente.
El camino de la integridad puede parecer más lento y costoso, pero sus recompensas son invaluables. Dios honra a quienes eligen Su voluntad por encima de la conveniencia personal. Cuando caminamos en rectitud, experimentamos Su favor, protección y bendiciones eternas. La paciencia y obediencia en el camino difícil siempre producen testimonios poderosos que glorifican Su nombre y edifican a otros creyentes que nos observan en nuestro peregrinaje terrenal.
Oremos juntos:
Padre celestial, ayúdanos a elegir siempre el camino estrecho de la obediencia, aunque sea más difícil. Fortalece nuestro corazón para resistir los atajos tentadores que nos alejan de Tu voluntad. Que tengamos la sabiduría para reconocer que Tu camino, aunque angosto, nos lleva a la vida abundante. En el nombre de Jesús, amén.
Video relacionado:
Generación 12 – Tus caminos Ft. Lau Guerra de Geração 12
