Cita bíblica:
Isaías 46:9 (RVR 1960): «Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí.»
Reflexión:
En momentos de incertidumbre, recordemos la fidelidad constante de Dios a lo largo de la historia. Isaías 46:9 nos invita a reflexionar sobre las obras pasadas de Dios, recordándonos que Él es único, incomparable, y su fidelidad se extiende desde el pasado hasta el presente y el futuro.
Consideremos nuestras propias vidas como testimonios vivientes de la fidelidad de Dios. Sus acciones en el pasado son garantía de su continuidad en el presente y en el mañana. En cada capítulo de nuestra historia, encontramos huellas divinas que confirman que Dios nunca nos abandona.
Un ejemplo bíblico es la historia de David y Goliat. En el pasado, Dios capacitó a David para vencer al gigante. En el presente, Dios también nos capacita para enfrentar nuestros propios «gigantes». La misma mano que guió la piedra de David nos guía hoy.
Dios es fiel en todas las estaciones de nuestra vida. Sus promesas perduran y su amor no cambia. Confiamos en que, como lo hizo en el pasado, Dios también obrará en nuestro presente y futuro. Nuestra fe se sustenta en su fidelidad eterna.
Oración:
Padre celestial, gracias por tu fidelidad constante. En momentos de duda, recordamos tus obras pasadas y confiamos en tu guía presente y futura. Fortalece nuestra fe y ayúdanos a descansar en tu amor inmutable. En el Poderoso nombre de Jesús oramos, Amén.
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