Cita bíblica:
«Vengan a mí todos los que están cansados y cargados, y yo les daré descanso.» – Mateo 11:28
Reflexión:
En un mundo lleno de dolor, confusión y enfermedad espiritual, cada uno de nosotros tiene una elección fundamental que hacer. Podemos ser portadores de la cura o dejarnos arrastrar por la enfermedad espiritual que nos rodea. El camino hacia la salud espiritual y la sanación comienza con Jesús.
Jesús mismo nos invita: «Vengan a mí todos los que están cansados y cargados, y yo les daré descanso.» Estas palabras nos muestran que Jesús es el refugio para aquellos que están cansados de la lucha y la enfermedad del alma. En Él, encontramos el descanso, la paz y la curación que tanto anhelamos.
La Biblia nos da ejemplos vívidos de cómo Jesús fue la cura para personas enfermas en cuerpo y alma. Él sanó a los leprosos, dio vista a los ciegos y perdonó a los pecadores. Su amor y poder curativo fueron evidentes en cada uno de estos actos milagrosos.
Conclusión:
En un mundo enfermo, tenemos la cura en Jesús. No solo para nuestras propias almas, sino también para compartir con los demás. Seamos portadores de la cura, mostrando a través de nuestras acciones y palabras que Jesús vive en nosotros. Al hacerlo, podemos llevar la sanación espiritual a un mundo necesitado.
Oración:
Señor, te agradecemos por ser la cura en un mundo enfermo. Ayúdanos a ser portadores de tu amor y sanación. Permítenos mostrar a los demás que tú vives en nosotros y que hay esperanza en medio de la enfermedad espiritual. Amén.
Canción Relacionada:
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