Cita bíblica:
Filipenses 2:14 – «Haced todo sin murmuraciones y contiendas.»
Reflexión:
La murmuración y la siembra de discordia son dos actitudes que pueden envenenar nuestras relaciones y entorpecer nuestro crecimiento espiritual. A menudo, caemos en la trampa de hablar mal de otros o sembrar discordia en lugar de practicar el amor y la unidad que Dios nos enseña.
Un ejemplo en la Biblia de las consecuencias de la murmuración se encuentra en el relato de los israelitas en el desierto. Su constante queja y murmuración los mantuvieron dando vueltas en el desierto durante 40 años. La murmuración no solo afectó su relación con Dios, sino también su destino.
La siembra de discordia es igualmente destructiva. La Biblia nos advierte sobre aquellos que siembran discordia entre hermanos, ya que Dios aborrece a los que siembran discordia (Proverbios 6:16-19).
En Filipenses 2:14, se nos insta a hacer todo sin murmuraciones ni contiendas. En lugar de quejarnos o sembrar discordia, debemos esforzarnos por practicar el amor, la comprensión y la unidad en nuestras vidas.
La murmuración y la siembra de discordia son actitudes que debemos evitar en nuestras vidas como cristianos. La Biblia nos llama a practicar el amor, la unidad y la comprensión en lugar de la negatividad. Siguiendo este camino, fortalecemos nuestras relaciones con Dios y con los demás, y construimos una vida que honra a nuestro Señor
Oración:
Padre celestial, perdónanos por las veces que hemos caído en la murmuración y la siembra de discordia. Ayúdanos a alejarnos de estos comportamientos negativos y a practicar el amor y la unidad en todas nuestras interacciones. Llena nuestros corazones de comprensión y paciencia para con los demás. Que nuestras palabras y acciones reflejen Tu amor. En el nombre de Jesús, amén.
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