Cita bíblica:
«Mejor el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.» – Proverbios 16:32
Reflexión:
En el ajetreo de la vida diaria, a menudo nos encontramos en situaciones que desafían nuestro dominio propio. Ya sea en medio del tráfico, enfrentando desafíos en el trabajo o lidiando con relaciones personales, el control de nuestras emociones puede ser un desafío. La Biblia nos enseña que el dominio propio es una cualidad esencial que debemos cultivar.
Tomemos como ejemplo a Jesús cuando fue tentado en el desierto (Mateo 4:1-11). A pesar de las provocaciones de Satanás, Jesús mantuvo su dominio propio y se apegó a la verdad de las Escrituras. Esta fortaleza interna le permitió resistir las tentaciones y mantener su camino en el propósito de Dios.
Así como Jesús, nosotros también debemos cultivar el dominio propio. Esto implica tomar decisiones conscientes para controlar nuestras emociones y acciones. No debemos permitir que la ira, el enojo o la impaciencia tomen el control. En cambio, debemos buscara la sabiduría y la fuerza en la oración y las Escrituras.
Oración:
Querido Señor, te agradecemos por tu ejemplo de dominio propio y fortaleza en medio de la tentación. Ayúdanos a cultivar esta virtud en nuestras vidas diarias. Concédenos la sabiduría y la paciencia para controlar nuestras emociones y actuar de acuerdo con tu voluntad. Que tu Espíritu Santo nos guíe en cada situación. Amén.
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