Cita bíblica:
Proverbios 3:5-6 (NVI) – «Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas.»
Reflexión:
La vida está llena de decisiones. Grandes y pequeñas, cada elección que hacemos puede influir en nuestro camino. Algunas decisiones son fáciles de tomar, mientras que otras nos mantienen despiertos por la noche, preocupados por si estamos haciendo lo correcto. En medio de este torbellino de decisiones, la Biblia nos ofrece una guía sabia: buscar la dirección de Dios antes de tomar una decisión.
En Proverbios 3:5-6, se nos insta a confiar en el Señor de todo corazón y a no depender de nuestra propia inteligencia. Esto significa reconocer a Dios en cada área de nuestras vidas, incluso en las decisiones aparentemente triviales. Cuando pedimos la dirección de Dios, estamos admitiendo nuestra necesidad de su sabiduría divina.
La historia de Jesús en el Jardín de Getsemaní es un ejemplo vívido de buscar la dirección de Dios en momentos críticos. Antes de enfrentar la crucifixión, Jesús pasó tiempo en oración, buscando la voluntad del Padre. Aunque la carga era inmensa, su decisión de someterse al plan divino cambió el curso de la historia de la humanidad.
Tomar decisiones a la ligera puede llevar a resultados lamentables. Nos apresuramos, confiamos en nuestra propia sabiduría y a menudo ignoramos las consecuencias. Pero cuando invitamos a Dios a ser parte de nuestras decisiones, abrimos la puerta a la sabiduría y la dirección divina.
Conclusión:
La vida está llena de decisiones importantes. No importa cuán pequeñas o grandes parezcan, cada elección cuenta. Entonces, ¿por qué no pedir dirección a Dios? Él conoce el camino que debemos seguir y tiene un plan para nuestras vidas. Al confiar en él, evitamos tomar decisiones precipitadas y buscamos la sabiduría que solo él puede ofrecer.
Oración:
Querido Padre Celestial, te agradecemos por tu amor y cuidado por nosotros. Sabemos que nuestras decisiones pueden tener un impacto duradero en nuestras vidas. Ayúdanos a confiar en ti de todo corazón y a buscar tu dirección en cada elección que enfrentemos. Que tu sabiduría ilumine nuestro camino y nos guíe hacia tu voluntad perfecta. En el nombre de Jesús, oramos. Amén.
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