Cita bíblica:
Génesis 18:33 (NVI) – «Y el Señor se fue después de haber hablado con Abraham, y Abraham volvió a su lugar.»
Reflexión:
La relación con Dios es un tesoro invaluable que puede transformar tu vida. Mira a Abraham, un amigo de Dios. Cuando el Señor visitó a Abraham en Mamré, no solo fue un encuentro casual, sino un ejemplo de la intimidad profunda que podemos tener con Dios.
Imagina a Abraham sentado junto al Todopoderoso, compartiendo conversaciones y sueños. Esta cercanía no solo le brindó sabiduría divina, sino también la promesa de un hijo en su vejez. La relación con Dios cambió el rumbo de su vida.
Así como Abraham, puedes experimentar esta cercanía. No se trata de una religión, sino de una relación personal con el Creador del universo. Dios anhela hablar contigo, conocerte y revelarte Su voluntad.
Abraham no solo caminó con Dios, sino que también se convirtió en un faro de fe para generaciones futuras. Su relación con Dios lo llevó a lugares insospechados. Siguió a Dios sin saber a dónde lo llevaría, confiando plenamente en Su guía.
Hoy, te animo a profundizar tu relación con Dios. Dedica tiempo en oración y meditación en Su Palabra. Abre tu corazón y permite que Su presencia transforme tu vida. Al igual que Abraham, tu relación con Dios puede cambiar tu destino y ser una luz para otros.
Oración:
Señor, deseo una relación más profunda contigo. Al igual que Abraham, quiero conocerte y seguir Tu voluntad. Gracias por estar siempre cerca. En el nombre de Jesús, amén.
Canción Relacionada:
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