Cita bíblica:
«No te acuerdes de las cosas pasadas, ni traigas a memoria las cosas antiguas.» (Isaías 43:18)
Reflexión:
En momentos de dificultad, es natural que a veces anhelemos volver atrás, a lo familiar y conocido. Sin embargo, como creyentes, es importante recordar que Dios nos ha sacado de nuestras circunstancias pasadas por una razón. Él nos ha dado un nuevo comienzo, nos ha rescatado de la esclavitud del pecado y nos ha dado vida en abundancia.
Cuando sentimos el deseo de volver atrás, debemos recordar la gracia y la misericordia de Dios que nos rescató y nos llevó a un nuevo nivel espiritual. Recordemos que Dios tiene un propósito para nuestras vidas y que cada experiencia, tanto las alegres como las dolorosas, ha sido parte de su plan para moldearnos y llevarnos más cerca de Él.
Imagina a alguien que ha luchado contra adicciones en el pasado y ha sido liberado por el poder de Dios. Aunque en momentos de tentación pueda sentir el deseo de volver a sus viejos hábitos, recuerda de dónde Dios lo sacó y cómo le ha transformado. En lugar de mirar hacia atrás, se aferra a su nueva identidad en Cristo y sigue adelante, confiando en que Dios le dará la fortaleza para resistir cualquier tentación.
Conclusión: Nuestro pasado puede tener un gran impacto en nuestra vida presente, pero no debemos permitir que nos defina ni nos detenga. En lugar de anhelar volver atrás, debemos abrazar el nuevo comienzo que Dios nos ha dado. Recordemos su fidelidad, su amor y su poder para transformar nuestras vidas. Confiamos en que Él tiene un plan y un propósito para cada uno de nosotros.
Oración:
Amado Padre, gracias por rescatarme y darme un nuevo comienzo en Cristo. Ayúdame a dejar atrás las cosas pasadas y a abrazar la vida abundante que tienes para mí. Dame la fortaleza y la sabiduría para resistir la tentación de volver atrás y concédeme el coraje para caminar en la dirección que has trazado para mí. Que mi vida sea un testimonio vivo de tu gracia y poder transformador. En el nombre de Jesús, Amén.
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