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Cita bíblica:

«Rescátame, oh Dios, porque las aguas han llegado hasta mi alma. Me he hundido en un abismo profundo, donde no puedo hacer pie; he llegado a aguas profundas, y la corriente me arrastra.» – Salmos 69:1-2 (NVI)

Reflexión:

La vida puede ser difícil, y a veces nos encontramos en situaciones en las que nos sentimos abrumados, atrapados y sin esperanza. En momentos como estos, es natural buscar ayuda y alivio. En el Salmo 69, el salmista está en una situación de desesperación, sintiendo que las aguas han llegado hasta su alma y que se está hundiendo en un abismo profundo. Él clama a Dios por ayuda, pidiéndole que lo rescate de las profundidades de su angustia.

¿Te encuentras en una situación similar? ¿Sientes que las aguas te están alcanzando, que estás hundiéndote en un abismo profundo? Si es así, debes saber que no estás solo. Muchos han pasado por la misma experiencia. Pero la buena noticia es que Dios está contigo, y puedes clamar a Él en busca de ayuda.

En el Salmo 69, el salmista reconoce su necesidad de ayuda y se acerca a Dios en oración. Él confía en el amor y la gracia de Dios para rescatarlo de su situación. Dios no es ajeno a nuestras luchas y angustias, Él escucha nuestro clamor y nos rescata.

Oración:

Padre celestial, hoy te pido que me rescates de las profundidades de mi angustia. Siento que las aguas han llegado hasta mi alma y que me estoy hundiendo en un abismo profundo. Pero sé que tú eres un Dios de amor y gracia, que escuchas mi clamor y me rescatas. Ayúdame a confiar en ti en medio de mi dolor y a encontrar descanso y paz en tu presencia. En el nombre de Jesús, amén..

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