Cita bíblica:
2 Corintios 4:4 NTV
Satanás, quien es el dios de este mundo, ha cegado la mente de los que no creen. Son incapaces de ver la gloriosa luz de la Buena Noticia. No entienden este mensaje acerca de la gloria de Cristo, quien es la imagen exacta de Dios.
Reflexión:
Vivimos en un mundo donde la pobreza, el hambre, la injusticia y la maldad son evidentes. La Biblia nos dice en 2 Corintios 4:4 que «Satanás, quien es el dios de este mundo, ha cegado la mente de los que no creen». Esta ceguera espiritual impide que muchos vean la luz de Cristo y comprendan su mensaje de amor y salvación. Sin embargo, Dios nos ha dado el poder de elegir, y en medio de esta oscuridad, podemos optar por la luz y encontrar propósito y esperanza en Él.
La historia de Sodoma y Gomorra es un claro ejemplo de cómo la maldad puede dominar un lugar cuando la presencia de Dios es rechazada. Estas ciudades estaban llenas de corrupción y pecado, tanto que Dios decidió destruirlas. Sin embargo, aún en medio de tanta oscuridad, Dios mostró misericordia a Lot y su familia, quienes fueron rescatados antes de la destrucción. Esto nos recuerda que, aunque el mundo esté bajo el dominio del mal, Dios siempre ofrece una salida para aquellos que eligen seguirle.
Es doloroso ver el sufrimiento de los inocentes en un mundo cruel y despiadado. La realidad es que el enemigo, el dios de este mundo, reina donde la presencia de Dios no está. Pero Dios nos da libre albedrío para elegir; es nuestra decisión acercarnos a Él o seguir las corrientes del mundo. Una vida sin Dios es de sufrimiento y desesperanza, mientras que una vida con Él es una vida de esperanza y propósito. Elijamos sabiamente y busquemos Su presencia.
El mundo está bajo la influencia del enemigo, pero no estamos destinados a vivir en la oscuridad. Dios nos ofrece la luz de Cristo, un camino de esperanza y redención. Si elegimos seguir a Dios, podremos ver más allá de la ceguera espiritual que afecta a tantos y vivir una vida llena de propósito y paz. Recordemos que, aunque la maldad esté presente, Dios siempre tiene el control y nos guía hacia un futuro lleno de Su graci.
Oración:
Señor, en un mundo lleno de oscuridad y maldad, te pido que abras mis ojos para ver tu luz. No permitas que mi corazón se endurezca ni que mi mente sea cegada por el enemigo. Dame la fortaleza para elegirte a Ti cada día, y la sabiduría para seguir tu camino. Que mi vida refleje tu amor y tu verdad, y que pueda ser un faro de esperanza para otros en este mundo. Amén.
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