Cita bíblica:
Santiago 1:12 (RVR 1960): «Bienaventurado el hombre que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.»
Reflexión:
Las pruebas y las dificultades pueden ser desafiantes, pero la Biblia nos dice que, en última instancia, son oportunidades de crecimiento y ascenso. En Santiago 1:12, se nos recuerda que el hombre que soporta la tentación y resiste la prueba será bienaventurado y recibirá la corona de vida.
Pensemos en las pruebas como ejercicios que nos preparan para el ascenso en nuestra relación con Dios. Cada dificultad que enfrentamos nos moldea, fortalece nuestra fe y nos acerca más a Dios. Así como el oro se purifica en el fuego, nuestras pruebas nos purifican y nos preparan para mayores bendiciones.
Un ejemplo en la Biblia es la historia de José, quien pasó por numerosas pruebas y adversidades. Aunque fue vendido como esclavo y encarcelado injustamente, José mantuvo su fe en Dios. Al final, Dios lo elevó al segundo cargo más alto en Egipto y lo usó para salvar a su familia y a muchas otras personas durante una hambruna.
Las pruebas no son obstáculos insuperables, sino escalones en nuestro camino de ascenso espiritual. Al mirar nuestras pruebas desde la perspectiva de Dios, podemos encontrar fortaleza y esperanza. La promesa de Dios es que, cuando resistimos la prueba, Él nos recompensará. Así que, afrontemos nuestras pruebas con fe y confianza en que Dios nos está preparando para un ascenso espiritual.
Oración:
Señor, ayúdanos a enfrentar nuestras pruebas con fe y paciencia. Permítenos verlas como oportunidades de crecimiento y ascenso en nuestra relación contigo. Fortalécenos en medio de las dificultades. Amén.
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