Cita bíblica:
«Mi alma tiene sed de ti, mi cuerpo te anhela en una tierra seca y árida donde no hay agua.» – Salmo 63:1 (NVI).
Reflexión:
Imagina un viaje a través del desierto, bajo el sol abrasador, donde la sed consume cada parte de tu ser. Tu única esperanza es encontrar agua para calmar esa sed abrumadora. En este Salmo, David comparte este sentimiento, pero su sed no es física, es espiritual. Anhela la presencia de Dios en su vida de la misma manera en que un viajero sediento anhela el agua.
David escribió este Salmo cuando estaba en el desierto de Judá, huyendo de la persecución de su propio hijo, Absalón. En medio de la angustia y el peligro, David no buscó refugio en un oasis terrenal, sino en la presencia de Dios. Su alma anhelaba estar cerca del Señor más que cualquier otra cosa.
¿Con qué frecuencia anhelamos la presencia de Dios en nuestras vidas de esa manera? A menudo, nuestras agendas ocupadas y las distracciones cotidianas pueden alejarnos de buscar activamente a Dios. Pero, ¿qué pasaría si anheláramos su presencia cada día, como David?
Cuando anhelamos a Dios, estamos reconociendo que Él es la fuente de nuestra verdadera satisfacción. Nada más puede llenar ese vacío en nuestro interior. La presencia de Dios no solo calma nuestra sed espiritual, sino que también nos guía, nos consuela y nos llena de paz en medio de las pruebas.
Un ejemplo vívido de este anhelo es el propio David. A pesar de los desafíos y peligros que enfrentaba, David buscaba a Dios con pasión. Recordemos cómo danzó ante el Arca del Pacto (2 Samuel 6) o cómo escribió numerosos salmos expresando su amor y deseo por la presencia de Dios. David entendía que la presencia de Dios era más preciosa que cualquier otra cosa en su vida.
Conclusión:
Hoy, te animo a seguir el ejemplo de David. Anhela la presencia de Dios cada día. Busca momentos de intimidad con Él en oración, lectura de la Biblia y adoración. Cuando priorizas a Dios sobre todas las demás cosas, encontrarás la satisfacción y la paz que solo su presencia puede brindar.
Oración:
Querido Padre Celestial, ayúdanos a anhelarte cada día como David lo hizo. Permítenos reconocer que tu presencia es la fuente de nuestra satisfacción y paz. Que podamos buscar siempre estar cerca de ti. En el nombre de Jesús, amén.
Canción Relacionada:
Te recomiendo escuchar la canción «Llévame A La Cruz» por Majo y Dan
Gracias x esos devocionales muy hermosos q nos ayudan para crecer espiritualmente y adquirir más amplio conocimiento sobre quien es nuestro rey y anhelemos deleitarnos con su palabra y adorarle para q ese gozo permanezca siempre activo en nuestras vidas bendiciones
Hola Margarita, nos complace mucho saber tu opinión acerca de los devocionales, esperamos que sigan siendo de bendición para ti, si crees que puede ser de bendición para alguien mas, no olvides compartirlo, también queremos contarte que tenemos nuestro canal de whatsapp donde enviamos cada mañana el devocional del día, puedes ingresar dando clic aquí https://whatsapp.com/channel/0029Va62SKIKbYMRRp7l0V0q
Un abrazo y Dios te bendiga!! 🙂